Un fin de semana largo en
Lisboa da para mucho, incluso para patear las numerosas
librerías que existen en la ciudad y encontrarte sorpresas agradables, como descubrir que
Como eu vi todos os países do mondo (menos um) -
Ed Don
Quixote-, el libro pó
stumo de
José Megre,
está entre los libros más vendidos en Portugal. La cifra de ventas y la
difusión del libro es reflejo del reconocimiento y estima que en su
país le tienen al autor, la persona que más he admirado y respetado de mi etapa en las carreras.

Es cierto que en
España, fuera del mundo de los viajes aventura y el
todoterreno no es una persona conocida. José
Megre, nacido en
Lisboa, formado como ingeniero en Londres, estuvo siempre ligado al
automovilismo, desarrollando una larga carrera profesional en el sector,
también como piloto de
rallyes en la década de los '70 y
después, ya en los '80, como pionero de los primeros
Dakar, cuando el
Dakar era una aventura muy distinta a lo que es hoy y posteriormente, como emprendedor creando el primer club organizador de viajes de aventura y competiciones 4x4,
convirtié
ndose en el "
pai" del
todoterreno portugués.
Pero
paralelamente a todo esto,
Megre ha sido, sobre todo, un viajero compulsivo. Desde sus primeros viajes en
Africa ya en los '60, José fue sumando, en sus viajes y expediciones por todo el mundo,
kilómetros y
países. Países que no se limitaba a visitar, sino que los exploraba y
escudriñaba buscando zonas
recó
nditas,
alejá
ndose de las rutas
turí
sticas, absorbiendo su cultura y acumulando experiencias y vivencias que pocas personas en el mundo atesoran.
Megre supo y pudo unir sus dos pasiones, los coches y los viajes, y lo hizo de manera intensa, como intensa fue su vida y como intensa era su persona.
Conocí a
Megre en 2001 en su faceta de organizador de las pruebas del Campeonato del Mundo de
Raids que se disputan en Portugal. José siempre trataba a
participantes, prensa y pú
blico que
acudía a sus pruebas como invitados y a pesar de ser el má
ximo responsable de una estructura
organizativa compleja como el
Clube Aventura, siempre tenía un momento para saludarnos y atendernos de forma cordial y
cariñosa.

Los ú
ltimos años
Megre cedió su estructura y la
organización de sus carreras al
ACP, aunque él
seguía siendo parte activa de la
organización. Más desocupado, tuvimos la
ocasión de intimar más y mantener alguna larga
conversación. De
Megré
imponía casi todo: su carisma, su estampa
clá
sica con su melena y barba blanca, casi siempre ataviado con un sobrero de ala negro; su hablar pausado y voz profunda y sus frases sentenciadoras y definitivas, de esas que solo alguien con su bagaje puede pronunciar. Pero a la vez
Megre era una persona de
cará
cter afable y casi paternal, que
hacía sentirle muy cercano. En una de estas carreras en Portugal, José nos
invitó a conocer su casa de Águas en
Beira Baixa, cerca de la frontera con Cá
ceres. Visitar su "casa" fue un privilegio y una experiencia ú
nica e impresionante. Una inmensa finca en la que,
además de la residencia principal, una preciosa casa solariega decorada con mobiliario, objetos é
tnicos y obras de arte traídos de cualquier parte del mundo,
había más de una decena de naves, almacenes, bodegas, establos ..... donde guardaba su infinita
colección de coches de miniatura, pero
también decenas de coches y motos
clá
sicos, los coches con los que
participó en su época como piloto, sus 4x4 del
Dakar y de sus expediciones,
vehículos militares y otros muchos objetos y "reliquias"
automovilí
sticas y hasta una
colección de tractores y todo tipo de maquinaria
agrícola antigua en un enorme lagar de aceite.
Podrías pasar días y días recorriendo la finca y sus
dependencias y siempre encontrarías algo
sorprendente y ú
nico.
La ú
ltima vez que vi a
Megré fue en octubre de 2008 en
Portalegre. Con aspecto
convaleciente, recién salido de una
intervención tras la que
probablemente los mé
dicos habí
an puesto fecha a su final, José nos
habló
precisamente de su
propósito de culminar el reto de visitar los 194
países del mundo. Al despedirnos tuve el
presentimiento de que era la ú
ltima vez que iba a ver a José, pero su fortaleza y su tesón aún le
permitió hacer un viaje más, a
Haití, su
país número 193. El 194,
Irak (el "
um" del título del libro) era, en esos momentos, "demasiado peligroso para permitir que alguien me
acompañe". José
Megre murió poco meses
después como
consecuencia del cá
ncer de
pulmón que arrastraba desde hacia años.
"Como
eu vi todos os
países do mondo (menos
um)" es un reflejo en texto y fotos de sus viajes y de su figura y el mejor recuerdo de alguien a quien
admiré y de
quién me siento enormemente orgulloso de haber conocido.
Irak se
perdió un visitante y una gran persona.
Enlaces:
Biografía y datos sobre los viajes de José Megre
El libro y el prólogo de sus hijos Ricardo y José Tomás MegreVídeo de la última intervención en televisión de Megre